Conoce la historia del Nudo Gordiano

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Conoce la historia del Nudo Gordiano

Al leer el título del artículo te preguntarás ¿qué es el nudo gordiano? ¿es como el nudo marinero?, no, no es un tutorial de nudos marinos y si bien la base es un acontecimiento real, quienes integramos este blog nos encanta rememorar acontecimientos históricos, sus implicaciones nos afectan a la hora de resolver dificultades.

Todo empieza hace mucho tiempo en la antigua Frigia, siendo Gordion su capital, donde había un nudo enmarañado en el carro de Gordias, fundador de la metrópoli. La leyenda decía que quien desatara el nudo, conquistaría Asia. Los historiadores registran que cuando Alejandro Magno vió el nudo gordiano, lo resolvió con el filo de su espada…y el resto de la historia ya la conocemos.

Es una relato muy interesante pero ¿qué tiene que ver con nosotros?

Se ha usado este suceso para analizar como afrontamos una dificultad en el ámbito laboral como personal, su resolución como todo en la vida permite más de un camino.

Veremos dos opciones para resolver una dificultad que se ha enquistado en el tiempo.

1- Cortar de raíz
2- Comprender y analizar sus factores

Opción 1: Cortar de raíz
Habiendo analizado de forma sosegada y con tiempo la solución de una dificultad, sea un proyecto laboral o personal siendo inviable una salida al mismo, la decisión que hemos tomado es cortar con el problema, ponerle fin o como dirían los franceses «c’est fini», se acabó.

Tirando de refranero popular «si algo no tiene solución…no es un problema» o una de sus variantes «porque preocuparse», el remate de esta frase deja claro que debemos dejar de inquietarnos ante un situación inamovible y asumir el corte con el mismo, esto abre ante nosotros un nuevo escenario y una valiosa lección aprendida.

Opción 2: Comprender y analizar sus factores
O dicho llanamente «hacerle una autopsia al problema». Si en el punto anterior comentamos que algunos ante una dificultad irresoluble deciden no gastar más energías y cortar con la situación, la otra cara de la moneda es desenredar esta difícil situación, intentando comprender sus partes y planificando un plan de acción que nos permita adaptarnos.

Ambas situaciones tienen algo en común: análisis hecho con tiempo y afrontar con diferentes decisiones la dificultad.

Esta moneda tiene una tercer cara: aquellos que ante un problema deciden postergar para más adelante la resolución del mismo. Sin embargo no es realista ya que tarde o temprano deberemos tomar una decisión y todos hemos comprobado en nuestras carnes que las prisas son malas consejeras.

Querido lector, esperamos que este breve relato histórico y sus interesantes implicaciones prácticas en nuestra vida te sean de utilidad.

Ya que estamos puestos en modo histórico, nuestro siguiente artículo pondra luz sobre algo intangible pero fundamental: los números

¡Hasta la próxima!

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