Seguramente la mayoría hemos pasado por la experiencia de ir a un buffet libre, donde se presenta ante nosotros un infinito número de delicias culinarias, siendo un paraíso para aquellos de buen comer y un incordio para los indecisos. Una vez que hemos tomado la decisión, buscamos algo que podamos disfrutar e incluso que sea «healthy food», curiosa época nos ha tocado vivir que para dar prestigio a algo debemos pronunciarlo en una lengua extranjera, dicho de más en ingles, bueno volviendo al tema, buscamos algo sano, que nos aporte sabor pero también bienestar a nuestro cuerpo, pero no hemos venido a hablar de comida o salud, sino que dicha ilustración prepara el terreno, nos sirve de preámbulo para hablar de los cursos online.

Internet es como es buffet libre donde las ofertas son inmensas para nuestra educación pero debemos ser muy selectivos ya que tirando de la analogía de la comida, debemos buscar una formación que sea de calidad, la calidad servirá de filtro para determinar que educación es la que necesitamos y por cuanto tiempo.

Aqui es donde entran en acción unos consejitos que con un buen café en mano puedas disfrutar.

1- Conoce a tu formador
¿Qué opiniones hay del centro de formación?. En Google podemos buscar la experiencia de antiguos o actuales alumnos que aunque no decidan por nosotros, si nos valdrá como termómetro.

2- Qué necesito
Si tenemos claro en que área debemos especializarnos, nos será más fácil encontrar una formación que se adecue a lo que estamos buscando

3- Se modesto
Podemos apuntarnos a un curso online, donde habrá plazos de entrega y una carga académica que puede adaptarse a nuestras circunstancias o tal vez no, eso es algo que debemos determinar antes, como dice el dicho «vísteme despacio que tengo prisa»

4- Cuanto cuesta
Somos muchos los que nos hemos valido de internet y específicamente Youtube como si de una biblioteca pública se tratara para formarnos. Hay formación de muy buena calidad que podemos encontrar en Youtube pero otra, más especializada, de más calidad, impartida por profesionales, sin el tufillo de amateur, deberemos pagar por ella. Esto también estará condicionado por nuestra cartera, poderoso caballero Don Dinero, como reza el dicho.

Querido lector, esperamos que estas sugerencias te hayan sido de utilidad, seguramente tendras experiencia en el tema, y comprendemos que no somos una isla en cuanto a formación, nos necesitamos, por ello agradeceremos mucho tu experiencia en los comentarios.

En el siguiente artículo hablaremos sobre ese misterioso personaje «el contador»

¡Hasta la próxima!.